A la comunidad de Sociales
Que cada quién se haga cargo de lo que le corresponde
A muy pocos días de terminada la toma de la Facultad de Sociales, con un final violento y abrupto, tenemos la necesidad de aproximarnos a lo que fueron y lo que dejaron estas siete semanas de conflicto.
En primer lugar, como afirmamos desde el comienzo de la toma, repudiamos el método elegido como medida de fuerza. Consideramos que no es vaciando las aulas la mejor forma en que se debe defender la universidad pública y gratuita, y mucho menos perjudicando al conjunto de la comunidad de Sociales con el objetivo focalizado en nacionalizar un conflicto y hacer cargo al Gobierno Nacional de una situación que, como lo marca el estatuto de la UBA, le corresponde resolver al Rectorado, dado que la Universidad es autárquica y autónoma.
Nos preguntamos qué tipo de debate sincero puede darse en un ámbito donde, para peticionar y obtener conquistas, hay que marginar a más del 80% de los estudiantes. Es claro que si las medidas de lucha y discusión se hubiesen dado en un contexto de aulas llenas, los resultados hubiesen sido mucho más interesantes. No creemos en vanguardias iluminadas que nos vayan a conducir a las grandes victorias, sino que defendemos un movimiento estudiantil activo y comprometido día a día con sus compañeros, con el objetivo de trabajar por la facultad y desde la facultad. Nuestro deber como cientistas sociales es involucrarnos decididamente con lo que pasa en nuestra sociedad y con todas aquellas políticas que tienden a generar mayor justicia social e igualdad.
Los acontecimientos que se sucedieron durante estos días fueron presentados como grandes victorias. Pero no lo son. Creen que la toma de un Ministerio fue lo que “arrancó” $20 millones para la obra junto a la firma que compromete al gobierno a licitar a partir del 1 de enero de 2011. Pero, ¿No son esos fondos los que se encuentran contemplados en el Proyecto de Ley de Presupuesto para el 2011 que se está tratando en el Congreso de la Nación?
A esta primera mentira le sumamos lo que muchas agrupaciones veníamos denunciando. Las garantías sobre los plazos de construcción y los recursos para el edificio de Constitución había que reclamarlos al rectorado. Luego de la toma del Ministerio de Educación, los representantes de la asamblea fueron a negociar con Hallú y el radical Mas Vélez para obtener las garantías (?) Sobre la construcción de la tercera parte del edificio. Nuestra pregunta es ¿por qué se esperó 45 días para llevar las peticiones al rectorado?
No sólo no tuvieron una victoria épica como nos quieren hacer creer, sino que si algo quedó demostrado durante este conflicto (y luego de 8 años de gestión del CECSo del PO y de La Mella) , es que estas agrupaciones no están a la altura de las circunstancias para conducir al movimiento estudiantil en Sociales. Se llevan un gran hito en sus CV, que es haber vaciado la Facultad durante 45 días con el único objetivo de generar un hecho político que les permitiera posicionarse hacia adentro y hacia afuera de la Facultad. La actual gestión del Centro no quiso ni supo conducir la asamblea, y nunca trató de evitar la pérdida irresponsable de días de clase. Muy al contrario, terminó pidiéndole auxilio a la gestión en las negociaciones llevadas a cabo con el Decano Caletti.
Todos los que conformamos la comunidad de la facultad, docentes, graduados, estudiantes y trabajadores no docentes, fuimos perjudicados en este conflicto. Por lo tanto creemos que es el momento para que todas y todos los estudiantes tomemos conciencia de que debemos involucrarnos con los destinos de nuestra facultad, sin convertirla sólo en un lugar de paso, adquiriendo un compromiso con lo que es nuestro y tenemos que defender. Esto implica que todos tenemos que hacernos cargo de qué tipo de Centro de Estudiantes queremos para nuestra facultad.
Desde La Mandrágora creemos que el CECSo debe ser una herramienta gremial al servicio de los estudiantes, pero también un eje articulador entre conocimiento y realidad, dando cuenta de las reales necesidades de la sociedad, fundamentalmente en favor de los sectores populares. Hoy tenemos, contrariamente, un Centro que lejos de ir en ese camino está alejado de todas las luchas populares, como lo han demostrado, por ejemplo, rechazando la Ley de Medios o desconociendo el debate del proyecto de reparto de ganancias presentado en la Cámara de Diputados de la Nación.
Que tantos errores, sirvan para algo.
Elecciones de Centro de Estudiantes Ya!
. Vamos juntos por el Estatuto para el Centro de Estudiantes, para que sea una herramienta verdaderamente democrática y representativa.
. Vamos por la modificación de los planes de estudio. Para discutir y fortalecer el contenido de nuestra formación.
. Vamos por la construcción de un CECSo comprometido con el país, que sea partícipe en los grandes debates públicos y contribuya a profundizar una Argentina más justa e igualitaria.
